Český Krumlov te trasladará a un cuento de hadas. Es una de las ciudades medievales mejor conservadas, acompañada de impresionantes paisajes. Cuenta con la segunda fortaleza más grande de la República Checa y ha sido escenario de muchas películas, además de contar con un meandro natural que deja la ciudad bañada por el río Moldava. Por todo ello es declarada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco.